martes, 31 de marzo de 2009

Corbacho: Conocerte es quererte.

Tras la impresionante subida estival del paro en España el flamante ministro de Trabajo, Celestino Corbacho anunció que vetaría los contratos de inmigrantes en origen. Le han llovido críticas de todos los lados. De los suyos, tanto del PSOE como del PSC (Cómo tener dos amores a la vez y no estar loco...), de sindicatos e incluso Gaspar Llamazares calificó a Corbacho de "xenófobo". En realidad no todo han sido críticas, el PP le ha ofrecido su apoyo para enfrentarse a de la Vega.
Conocer a Corbacho es quererle. Qué bien vivía en la Alcaldía de L´Hospitalet de Llobregat y en la Diputación de Barcelona. Cualquier cosa que decía era aclamada. Corre el rumor de que un ayudante suyo asintió con tanta fuerza ante una idea de su jefe que se fracturó la barbilla con el pecho. Qué bien vivía de capitan del PSC, de barón del PSOE o como se ha oído tantas veces de cacique de L´Hospitalet.
Ahora cuando habla no esculpen sus palabras en mármol. Ahora se las examinan... y no cubre el expediente. No puede seguir diciendo lo primero que le pasa por la cabeza. Lo he pensado detenidamente y no entiendo como Corbacho pudo sacar la conclusión de que como hay parados en España no pueden venir inmigrantes. Acaso cuando tú llegaste a Catalunya no habían parados aquí.Y no digas que no es lo mismo, o mejor dicho se lo explicas a tus "compis" del Govern de la Generalitat que prefieren ser solidarios con el Sur de Francia antes que con el Oeste de España. Puede que la solución esté en que vuelvas a explicar tu viaje en tren desde Extremadura a Barcelona y que nos vuelvas a explicar las penurias que pasaste cuando eras un joven inmigrante. Sólo de pensarlo ya se me nublan los ojos.
Recuerda Corbacho que el PP te apoya, recuerda que siempre te quedará el PP. En L´Hospitalet somos muchos los que siempre hemos sabido que decir que eres socialista no te convierte en socialista...son tus hechos y tus hechos van saliendo a la luz.

domingo, 29 de marzo de 2009

Aprovechando el viaje.


Columna de José Manuel García Bravo. Concejal de C´s en Sant Andreu de la Barca.


En el orden del día del próximo pleno figura la adhesión al Pacto de Alcaldes (Covenant of majors), puesto en marcha por la Unión Europea, como mecanismo de participación de la ciudadanía en la lucha contra el calentamiento de la tierra. Esta iniciativa compromete a los ayuntamientos a iniciar una serie de actuaciones para contribuir a la reducción de emisiones de CO2. El plan de acción implicará costes por su desarrollo e implementación y los derivados de acudir a Bruselas a suscribir el compromiso, si no se ha hecho ya. Sin ningún género de dudas se aprobará por unanimidad.

Sin embargo tenemos un problema doméstico mucho más cercano que no se soluciona. Año tras año podemos observar en los informes emitidos por la Generalitat de Catalunya que la emisión de partículas PM10 a la atmósfera de nuestro municipio se mantiene constante. Sant Andreu de la Barca forma parte de ese grupo selecto de 5 municipios del Baix Llobregat en que la presencia de este contaminante supera los límites máximos. Casualmente Castellbisbal, sede de la empresa identificada como contaminante, no figura entre esos municipios.

Según un estudio de la Comisión Europea, publicado a comienzos de 2005, la presencia de estas partículas en la atmósfera produce cada año 288.000 muertes prematuras. Otro estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicado en 2004 afirma que la exposición a las partículas en suspensión es la causa de muerte prematura de 13.000 niños de entre uno y cuatro años de edad, cada año.

El problema está identificado, las soluciones planteadas han pasado por ser puramente administrativas y de trámite. La Generalitat de Catalunya, competente en la materia, sitúa a Sant Andreu de la Barca en una zona de protección especial desde hace años, sin más. Nuestro Alcalde, durante la campaña electoral de las municipales, firmó un convenio con la empresa CELSA, identificada como la emisora de este contaminante, comprometiéndose una y otra parte a solucionar el problema. Nada de nada, los datos están ahí.

Ciutadans lleva dos años pidiendo datos del cumplimiento de ese convenio y sobre las acciones que se van a llevar a cabo para solucionar este problema. Recientemente nuestro Alcalde ha vuelto a firmar otro convenio en el que CELSA aporta a nuestro municipio 60 mil euros para la implementación, creación, realización de servicios y actividades culturales, docentes, educativas y sociales. Desde Ciutadans rechazamos esa aportación económica y le decimos a Celsa que utilice ese dinero para implementar medidas que permitan reducir la emisión de los contaminantes. Obviamente a nuestro Alcalde le pedimos que devuelva ese dinero. El silencio no se compra.

Asimismo le recordamos a nuestro Alcalde la Sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, de 25 de julio de 2008, que obliga a la realización de planes de acción a corto plazo para minimizar la contaminación por PM10 a valores no perjudiciales para la salud humana. Esta sentencia la pueden obtener en la sede del Tribunal que se encuentra en Luxemburgo, muy cerca de Bruselas. Así aprovechan el viaje.

sábado, 28 de marzo de 2009

viernes, 27 de marzo de 2009

Despido (I)

Una opinión de Ángel de la Fuente, publicada en El Periódico de Catalunya.

En las últimas semanas hemos asistido a una agria controversia sobre la necesidad de una reforma del mercado laboral. Aunque se trata de un debate muy necesario, resulta desafortunado que la discusión se haya centrado casi exclusivamente en la reducción de los costes de despido. No es este el problema central de nuestro mercado de trabajo y tampoco es un buen punto de partida para un análisis en profundidad del tema.
Los costes de despido son un componente más del salario, entendido en sentido amplio como el coste unitario del trabajo. Si este componente del salario se reduce, otros tenderán a aumentar hasta que se restablezca el equilibrio entre el poder negociador de empresas y sindicatos. El ajuste, sin embargo, no sería inmediato y esto explica el interés de la patronal por la medida: en la situación actual, podría suponer un alivio rápido y significativo para las empresas que más lo necesitan, aunque seguramente también una aceleración a corto plazo de la destrucción de empleo. A largo plazo, sin embargo, la cuestión más relevante no es el coste medio del despido, sino la asimetría que existe entre distintos tipos de contratos laborales.
Que una parte de la remuneración de los asalariados tome la forma de las actuales indemnizaciones por despido tiene sentido porque permite a los trabajadores comprar una especie de seguro frente a la inestabilidad laboral. Cuando los costes de despido son elevados, las empresas se lo piensan más antes de despedir a sus trabajadores en períodos recesivos y, por lo tanto, la probabilidad de mantener el empleo en malos tiempos es mayor. O al menos lo será mientras los tiempos no sean demasiado malos. Cuando lo son en extremo, la imposibilidad de reducir plantillas a un coste razonable puede acabar de dar la puntilla a empresas que podrían haber sido viables, aumentando así la pérdida de puestos de trabajo.
Descontando tales situaciones extremas, la existencia de costes de despido tiende en principio a reducir la volatilidad del empleo, lo que seguramente es bueno desde un punto de vista social, y no parece que afecte demasiado a su nivel medio.

jueves, 26 de marzo de 2009

Para el PSOE primero, el Real Madrid.

Noticia publicada en El Periódico de Catalunya.


El pasado martes, 10 de marzo, las votaciones de los diputados en el Pleno del Congreso se retrasaron hasta las nueve de la noche. Un diputado socialista no pudo evitar la tentación de usar el ordenador de su escaño para consultar, en plena votación, el resultado del partido de Champions entre el Liverpool y el Real Madrid. El parlamentario compaginó la actividad digital de votar con su pasión deportiva. Ese día, el PSOE no perdió ninguna votación. El Madrid sí salió goleado.

miércoles, 25 de marzo de 2009

Alberto Contador


Declaraciones del ciclista a la revista ELLE:


"Mi lema en la vida es querer es poder. Cuando un español pelea por los primeros puestos todo el mundo se vuelca. Así que la bandera es algo que debería ser de todos, un orgullo, como en el resto de países" ... "Siento envidia de EEUU. Antes de cada carrera todos cantan su himno. A nosotros nos cuesta, tenemos que desprendernos del pasado".

martes, 24 de marzo de 2009

Fue-ra-po-li-cía delauni-ver-si-dá


Félix de Azúa en El Periódico de Catalunya
El título que encabeza este artículo fue coreado por miles de estudiantes españoles, con el ritmo exacto de las sílabas propuestas, hace unos 40 años. Algunas cosas duran mucho, pero ninguna dura para siempre. Me asombró volver a oír la cantinela el otro día, en los mil reportajes sobre el desalojo de la Universidad de Barcelona.
Cuando esta canción sonó por primera vez, España era un país que se mantenía en el tercer mundo con el fin de que unas cuantas familias vivieran en el primero. Esas familias (madrileñas, sevillanas, vascas y catalanas), nunca lograron vivir en el primer mundo, pero les hacía ilusión creerlo. Y entonces se compraban un Dodge. Era patético. En cambio, la universidad española era, sin la menor duda, un centro educativo del tercer mundo. Es decir, un centro de adoctrinamiento y represión en el que nos enseñaban el sentimiento de pertenencia, la importancia de la lengua y el amor a la nación. En ese orden, la educación sigue teniendo un componente arcaico: nuestra confusa autoridad no cree que la enseñanza sirva para que la gente se entere de algo, sino para fabricar súbditos apasionados por el delirio de los jefes.

SOLO
GRACIASa un conservadurismo pétreo puede seguir sonando la cantinela de la policía y de la universidad. ¿Qué es lo que impide la fraternidad de policías y estudiantes, cuando lo tienen todo en común? Son de la misma clase social, cobran poco, soportan jefes absurdos, los ciudadanos les hacen la pelota pero prefieren tenerlos lejos de casa, en fin, en un examen rápido constataríamos que policías y estudiantes piensan lo mismo sobre casi todo, son del mismo equipo de fútbol, ven los mismos programas de TV, juegan a lo mismo en la Playstation, compran ropa de la misma marca, ligan en el mismo establecimiento nocturno, en fin, que no sé en qué se distinguen una vez dejan la porra unos y el porro otros.
¿Alguien cree todavía en la rebeldía ontológica del estudiante? ¿Ese tópico francés? El universitario (he conocido sobre 10.000) es últimamente persona sosegada, de usos regulares, ideas adquiridas en los medios burgueses, atento con la jefatura patria, astuto para sortear a la familia, etcétera. Por supuesto, del plan Bolonia no conoce ni el párrafo introductorio. Y aunque lo conociera da lo mismo, porque sin plan Bolonia los títulos españoles no servirían en Europa. Tal como van las cosas, ni en España: solo en la comunidad autónoma. No me parece mal, francamente, pero creí que la idea era formar parte del continente.
Ahora bien, distingamos. Dentro de la masa estudiantil hay unos cuantos que sí han leído el plan Bolonia y no les gusta. A su vez, los del cuerpo de policía tienen unos jefes que no han leído nada. A partir de ahí se da un choque perfecto entre policías y estudiantes. Los universitarios que han estudiado el plan Bolonia constatan que se trata de hacer la universidad cada vez más empresarial y capitalista. En plata: se quiere acabar con la universidad humanista que ha durado mil años. Ya no sirve a los intereses de financieros y empresarios, que es como decir que no sirve a los intereses políticos. De ahí que unos pocos estudiantes (y excelentes profesores como Jordi Llovet, gran tipo y maestro) se pongan en contra.
En cuanto alguien protesta pacíficamente ya se sabe que hay 2.000 sujetos que van a usarlo para divertirse. Cuando ven una manifestación en Barcelona, sea contra Bolonia, a favor del Barça, por la paz, contra España, o por los porteros de discoteca, de inmediato arman un sindiós. Las Ramblas son criminógenas. La Diagonal o la Gran Vía la cortan tres palurdos. Paralizan la ciudad cien fulanos. Si ustedes eran estudiantes en la España de Franco, recordarán el gusto que daba ver a los conductores cabreados como monas porque unos chavales les decían que de allí no pasaban. Era comprensible: los estudiantes no teníamos coche. Ahora es por tocar las narices. Y entonces adviene el choque perfecto de policías y estudiantes.

LOS
JEFESpolíticos ignoran cómo se lleva una revuelta en una urbe como Barcelona. El conseller Saura es el menos adecuado para dirigir un asalto a la universidad porque jamás se ha puesto en la cabeza de un policía, solo en la de un comisario. Y su director general, que quizás proceda del seminario o del escalafón de La Caixa (no sé ni cómo se llama), hace lo que puede. Y lo que puede es decirle a los policías que despejen el tráfico. En Barcelona un coche siempre es del Barça y tiene prioridad. Los policías cumplen y cargan. Quienes han sufrido una carga saben que es un lío y, según pude ver, los policías tenían dificultades para encontrar un estudiante detrás de tanto fotógrafo, de modo que éstos cayeron como moscas. Forma parte del sueldo.
Lo chocante es que Saura, su subordinado, y el jefe de ambos y de la Generalitat, digan que la culpa es de la policía. Señores de la autoridad: ni los estudiantes ni los policías tienen culpa alguna ni pueden tenerla. Ambos han cumplido con su obligación y han hecho lo que sabíamos que harían. Los unos tratar de cargarse la barrera, los otros romperle la cara a quien se les pusiera delante. Los culpables son ustedes que no tienen ni idea de cómo se lleva una ciudad. Y que se meten debajo de la cama en cuanto oyen la palabra "conflicto".

sábado, 21 de marzo de 2009

Viejos vicios

jueves, 19 de marzo de 2009

miércoles, 18 de marzo de 2009

Armas con ritmo.


Promo india de Rafael, industria armamentística israelí

Anuncio de armas de la mayor empresa israelí de armamento, Rafael, al más puro estilo Bollywood, con motivo de la recientemente celebrada Aero India 2009 en Bangalore.

lunes, 16 de marzo de 2009

Carod Tours

sábado, 14 de marzo de 2009

domingo, 8 de marzo de 2009

martes, 3 de marzo de 2009