Con el debido respeto, quiero contestar a la alcaldesa de L’Hospitalet de Llobregat, Núria Marín, sobre la seguridad ciudadana. En una entrevista publicada por EL PERIÓDICO el 15 de enero, Marín dice que «algunos ciudadanos están demasiado preocupados» en ese sentido. Los vecinos de L’Hospitalet no exageramos los problemas de inseguridad, y a los hechos me remito: vivo en el barrio de Santa Eulàlia, y hace tres años, al regresar a casa sobre las dos de la madrugada, fui asaltado en el portal por tres individuos que me golpearon hasta que consiguieron arrancarme la cartera del bolsillo y salir corriendo. Cuando pude reincorporarne, llamé al 091, pero la respuesta fue que tenía que llamar a los Mossos.
Afirma la alcaldesa que camina tranquila por las noches en algunos barrios, y que en otros tiene que ir un poco alerta. Lo que queremos los vecinos es ir tranquilos por cualquier barrio.
Tampoco pretendo alarmar a nadie. L’Hospitalet es hoy en día una ciudad agradable que se ha transformado en poco tiempo, pero sus habitantes tenemos derecho a poder vivir sin miedo.
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